Cinco consejos para dejar de quejarte
Hoy en día recibimos muchas quejas tanto de los jóvenes como de los adultos, debido principalmente a los pensamientos negativos que invaden la mente de las personas. Añadido a estos pensamientos, tenemos también el problema del miedo. Miedo a fallar, miedo a no tener éxito, miedo a no tener una situación estable. Todo lo que acabamos de evocar puede generar algunos bloqueos en la vida de quienes viven dichas situaciones. Por ello, a continuación vamos a compartir contigo, joven, cinco consejos que te pueden ayudar a superar estas situaciones que te llevan siempre a la queja.
Sin embargo, es conveniente saber que la calidad de nuestra vida depende de la calidad de nuestras emociones. En cuanto las emociones son buenas, nuestra vida transparenta luz, y si son malas, nuestra vida entra en la sombra. Hay entonces que apostar siempre por las buenas emociones.
1. La filosofía del vaso a mitad lleno: es evidente que, si un vaso está a mitad lleno, automáticamente él está también a mitad vacío. ¿Qué nos sugiere esta imagen del vaso? El vacío se identifica con la crisis que vive el sujeto y cada crisis nos invita a dotarnos de medios para salir adelante. Los grandes éxitos, las grandes empresas, las grandes personalidades no se han construido o montado en un día, ni tampoco sin esfuerzos o grandes dificultades. Para poder lograr su éxito han pasado y vivido momentos de crisis. Lo que cuenta aquí es la constancia y la perseverancia en lo que hemos elegido alcanzar. Solo con ello podremos rellenar la mitad del vaso que aparece vacía.
2. Un fallo en la vida no es el fallo de toda la vida: hay que aprender a aceptar los fallos porque nos ayudan a mejorar. La perfección no existe en nuestro mundo, todos aspiramos a la perfección, pero nadie es perfecto. Entonces, si admitimos los errores es porque queremos aprender de ellos. Mucha gente le tiene miedo a fallar, y por eso le cuesta tomar iniciativa o aceptar retos. Lo que olvidamos a veces es que el fallo asumido es ya una puerta abierta al éxito.
3. Aceptar lo que somos y lo que tenemos: una queja que siempre aparece en el mundo joven, es la de querer ser como…, vivir como…, comer como…, vestirse como… Al final, la pregunta que se nos puede hacer es: “¿quién eres tú?”, y “¿quién quiere ser como tú?” Para que la gente también pueda ser como tú, tienes que ser tú mismo y forjarte una personalidad fuerte que te lleva a aceptar lo que tienes y lo que eres.
4. Los cambios no tienen un tiempo concreto: una persona puede decidir cambiar y ser diferente a partir de una decisión tomada. No hay un tiempo concreto para cambiar su forma de vivir. Se suele escuchar a gente decir: “Cuando sea mayor, haré eso, viviré así, me empeñaré en aquello...” Lo que olvidamos es que todo es dinámico. De hecho, tenemos que aprender a dinamizar nuestras elecciones y decidir buscar soluciones alternativas a problemas nuevos que nos plantea la vida.
5. Buenas decisiones nos dan la felicidad: una decisión bien pensada y asumida con responsabilidad nos abre la puerta a la felicidad. Si desde el principio hemos decido fijarnos unos objetivos a alcanzar, en cuanto los logramos, toda nuestra existencia cambia y se hace feliz.
Así que, querido joven, las quejas nunca te ayudarán a conseguir lo que necesitas para ser feliz. Hay que buscar siempre soluciones a los problemas que te plantea la vida. Hay que apostar siempre por lo que es positivo y asumir nuestras elecciones.
Autor: Clément Tsanga Mbia, Sch. P., miembro oficial de la Asociación Internacional de Artes Marciales Contra las Adiciones